Evangelio Viviente
Cristo el agua de vida
Lee Juan 7.36-38
Se ofrece para ti como tesoro inigualable (Mateo 13.44: «Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo».), como pastor amante (Juan 10.11: «Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas».) y también como rey todopoderoso (Juan 18.36: «Respondió Jesús: Mi reino no es de este mundo; si mi reino fuera de este mundo, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los judíos; pero mi reino no es de aquí».), pero Jesucristo también se te ofrece como agua viva que se debe beber. Pero ¿qué significa creer en Jesús como agua que da vida?
Cristo afirmó: «Si alguno tiene sed, venga a mí y beba» (Juan 7.37). También prometió: «El que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna» (Juan 4.14). En otra parte, el Señor relacionó beber con creer en Él y venir a Él: «Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás» (Juan 6.35). En otras palabras, creer en Jesús y beber el agua que salta para vida eterna son la misma cosa.
Creer en Cristo cuando se nos ofrece como agua que da vida, no significa simplemente creer que esta agua da vida. El agua da vida cuando la bebemos. Jesucristo te da vida cuando confías en Él. Confiar en Cristo como agua significa, por tanto, beber el agua. Es decir, significa recibir a Jesucristo y toda la gracia que da vida de Dios, que viene a ti en Él: «el que me recibe a mí, recibe al que me envió» (Mateo 10.40). Creer en Jesús incluye beber a Cristo Jesús como el agua de la vida que apaga la sed del alma; es decir, significa saborear y sentirse satisfecho con todo lo que Dios representa para ti en Jesucristo. ¿Ya has bebido de esta agua de vida?
Reflexión:
Cristo satisfice mi sed espiritual porque Él es agua viva que fluye en mí cada día.