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The Daily Audio Bible

This reading plan is provided by Brian Hardin from Daily Audio Bible.
Duration: 731 days

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Nueva Biblia de las Américas (NBLA)
Version
Génesis 39:1-41:16

José prospera en Egipto

39 Cuando José fue llevado[a] a Egipto, Potifar, un oficial egipcio de Faraón, capitán de la guardia, lo compró a[b] los ismaelitas(A) que lo habían llevado[c] allá. Pero el Señor estaba con José(B), que llegó a ser un hombre próspero, y vivía en la casa de su amo el egipcio. Vio su amo que el Señor estaba con él(C) y que el Señor hacía prosperar en su mano todo lo que él hacía(D).

Así José halló gracia ante sus ojos y llegó a ser su siervo personal[d](E); y él lo hizo mayordomo sobre su casa y entregó en su mano todo lo que poseía(F). Y sucedió que desde el tiempo que lo hizo mayordomo sobre su casa y sobre todo lo que poseía, el Señor bendijo la casa del egipcio por causa de José(G). La bendición del Señor estaba sobre todo lo que poseía en la casa y en el campo(H). Así que todo lo que poseía lo dejó en mano de José, y con él allí no se preocupaba de[e] nada, excepto del pan que comía. Y era José de gallarda[f] figura y de hermoso parecer(I).

José y la mujer de Potifar

Sucedió después de estas cosas que la mujer de su amo miró[g] a José con deseo(J) y le dijo: «Acuéstate conmigo(K)». Pero él rehusó(L) y dijo a la mujer de su amo: «Estando yo aquí[h], mi amo no se preocupa de nada[i] en la casa, y ha puesto en mi mano todo lo que posee. No hay nadie[j] más grande que yo en esta casa(M), y nada me ha rehusado excepto a usted, pues es su mujer. ¿Cómo entonces podría yo hacer esta gran maldad y pecar contra Dios(N)?». 10 Y ella insistía[k] a José día tras día, pero él no accedió a[l] acostarse con ella o a estar con ella.

11 Pero un día[m] que él entró en casa para hacer su trabajo, y no había ninguno de los hombres de la casa allí dentro, 12 entonces ella tomó a José de la ropa, y le dijo: «¡Acuéstate conmigo!». Pero él le dejó su ropa en la mano, y salió huyendo afuera. 13 Cuando ella vio que él había dejado su ropa en sus manos y había huido afuera, 14 llamó a los hombres de su casa y les dijo: «Miren, Potifar nos ha traído un hebreo[n] para que se burle de nosotros; vino a mí para acostarse conmigo, pero yo grité a gran voz. 15 Cuando él oyó que yo alzaba la voz y gritaba, dejó su ropa junto a mí y salió huyendo afuera».

16 Ella dejó junto a sí la ropa de José hasta que su señor vino a casa. 17 Entonces ella le habló con[o] estas palabras: «Vino a mí el esclavo hebreo que nos trajiste, para burlarse de mí(O). 18 Y cuando levanté la voz y grité, él dejó su ropa junto a mí y huyó afuera».

José echado en la cárcel

19 Cuando su señor escuchó las palabras que su mujer le dijo: «Esto es lo que[p] tu esclavo me hizo», se encendió su ira(P). 20 Entonces el amo de José lo tomó y lo echó en la cárcel(Q), en el lugar donde se encerraba a los presos del rey. Allí permaneció en la cárcel. 21 Pero el Señor estaba con José(R), le extendió Su misericordia y le concedió gracia ante los ojos del jefe de la cárcel(S).

22 El jefe de la cárcel confió en mano de José a todos los presos que estaban en la cárcel(T), y de todo lo que allí se hacía él era responsable. 23 El jefe de la cárcel no supervisaba nada que estuviera bajo la responsabilidad de José[q](U), porque el Señor estaba con él(V), y todo lo que él emprendía, el Señor lo hacía prosperar(W).

José interpreta dos sueños

40 Después de estas cosas, sucedió que el copero(X) y el panadero del rey de Egipto ofendieron a su señor, el rey de Egipto. Faraón se enojó contra sus dos oficiales(Y), contra el jefe de los coperos y contra el jefe de los panaderos. Y los puso bajo custodia en la casa del capitán de la guardia(Z), en la cárcel, en el mismo lugar donde José estaba preso. El capitán de la guardia se los asignó a José, y él les servía. Allí estuvieron bajo custodia por algún tiempo[r].

Entonces el copero y el panadero del rey de Egipto, que estaban encerrados en la cárcel, tuvieron[s] ambos un sueño en una misma noche, cada uno su propio sueño, y cada sueño con su propia interpretación. Cuando José vino a ellos por la mañana y los observó, vio que estaban decaídos. Y preguntó a los oficiales de Faraón que estaban con él bajo custodia en casa de su señor[t]: «¿Por qué están sus rostros tan tristes hoy(AA)?». Y ellos le respondieron: «Hemos tenido[u] un sueño y no hay nadie que lo interprete(AB)». Entonces les dijo José, «¿No pertenecen a Dios las interpretaciones(AC)? Les ruego que me lo cuenten».

Sueño del copero del rey

Contó, pues, el jefe de los coperos su sueño a José, y le dijo: «En mi sueño, vi que había una vid delante de mí, 10 y en la vid había tres ramas. Y al echar brotes, aparecieron las flores, y sus racimos produjeron uvas maduras. 11 La copa de Faraón estaba en mi mano. Así que tomé las uvas y las exprimí en la copa de Faraón, y puse la copa en la mano[v] de Faraón». 12 Entonces José le dijo: «Esta es su interpretación(AD): los tres sarmientos son tres días. 13 Dentro de tres días Faraón levantará su cabeza[w], le restaurará a su puesto y usted pondrá la copa de Faraón en su mano como acostumbraba antes cuando era su copero. 14 Solo le pido que se acuerde de mí[x] cuando le vaya bien, y le ruego que me haga el favor de hacer mención de mí a Faraón, y me saque de esta casa(AE). 15 Porque la verdad es que yo fui secuestrado de la tierra de los hebreos(AF), y aun aquí no he hecho nada para que me pusieran en el calabozo[y]».

Sueño del panadero del rey

16 Cuando el jefe de los panaderos vio que había interpretado favorablemente, dijo a José: «Yo también vi en mi sueño que había tres cestas de pan blanco sobre mi cabeza. 17 Sobre la cesta de encima había toda clase de manjares hechos por un panadero para Faraón, y las aves los comían de la cesta sobre mi cabeza».

18 Entonces José respondió: «Esta es su interpretación: las tres cestas son tres días; 19 dentro de tres días Faraón le quitará[z] la cabeza de sobre usted, le colgará en un árbol y las aves comerán la carne[aa] de su cuerpo».

Cumplimiento de las interpretaciones

20 Y sucedió que al tercer día, que era el día del cumpleaños(AG) de Faraón, este hizo un banquete para todos sus siervos, y levantó la cabeza del jefe de los coperos y la cabeza del jefe de los panaderos en medio de sus siervos(AH). 21 Y restauró al jefe de los coperos a su cargo de copero y este puso la copa en manos[ab] de Faraón(AI); 22 pero ahorcó al jefe de los panaderos, tal como les había interpretado José(AJ). 23 Pero el jefe de los coperos no se acordó de José, sino que se olvidó de él(AK).

Los sueños de Faraón

41 Y aconteció que después de dos años[ac], Faraón tuvo un sueño. Soñó que estaba de pie junto al Nilo. Y de pronto[ad], del Nilo subieron siete vacas de hermoso aspecto y gordas[ae], y pacían en el carrizal(AL). Entonces otras siete vacas de mal aspecto y flacas[af] subieron del Nilo detrás de ellas, y se pararon junto a las otras vacas a la orilla del Nilo. Y las vacas de mal aspecto y flacas[ag] devoraron las siete vacas de hermoso aspecto y gordas. Entonces Faraón se despertó.

Se quedó dormido y soñó por segunda vez. Vio que siete espigas llenas y buenas crecían en una sola caña, y que siete espigas, menudas y quemadas por el viento del este, brotaron después de aquellas. Y las espigas menudas devoraron a las siete espigas gruesas y llenas. Entonces Faraón despertó, y resultó que era un sueño.

Y por la mañana su espíritu estaba turbado(AM), y mandó llamar a todos los magos[ah](AN), y a todos sus sabios de Egipto(AO). Faraón les contó sus sueños[ai], pero no hubo quien se los pudiera interpretar a Faraón(AP).

Entonces el jefe de los coperos habló a Faraón: «Quisiera hablar hoy de mis faltas[aj](AQ). 10 Cuando Faraón se enojó con sus siervos y me puso bajo custodia en la casa del capitán de la guardia, a mí y al jefe de los panaderos(AR), 11 él y yo tuvimos[ak] un sueño en una misma noche. Cada uno de nosotros soñó según la interpretación de su propio sueño(AS). 12 Y estaba allí con nosotros un joven hebreo, un siervo del capitán de la guardia(AT). Y se los contamos, y él nos interpretó los sueños. A cada uno interpretó su[al] sueño(AU). 13 Tal como nos lo había interpretado, así sucedió. A mí me restableció Faraón en mi puesto, pero al otro[am] lo ahorcó(AV)».

José interpreta el sueño de Faraón

14 Entonces Faraón mandó llamar a José(AW), y lo sacaron aprisa del calabozo[an]. Después de afeitarse y cambiarse sus vestidos, vino a Faraón(AX). 15 Y Faraón dijo a José: «He tenido[ao] un sueño y no hay quien lo interprete(AY). Pero he oído decir de ti[ap], que oyes un sueño y lo puedes interpretar[aq](AZ)». 16 «No está en mí(BA)», respondió José a Faraón. «Dios dará a Faraón una respuesta favorable[ar](BB)».

Mateo 12:46-13:23

La madre y los hermanos de Jesús

46 (A)Mientras Jesús aún estaba hablando a la multitud, Su madre(B) y Sus hermanos(C) estaban afuera, deseando hablar con Él. 47 Y alguien le dijo: «Tu madre y Tus hermanos están afuera y te quieren hablar». 48 Pero Jesús respondió al que le informó: «¿Quién es Mi madre, y quiénes son Mis hermanos?».

49 Y extendiendo la mano hacia Sus discípulos, dijo: «¡Miren, aquí están Mi madre y Mis hermanos! 50 Porque cualquiera que hace la voluntad de Mi Padre que está en los cielos, ese es Mi hermano y Mi hermana y Mi madre».

Parábolas sobre el reino

13 Ese mismo día salió Jesús de la casa(D) y se sentó (E)a la orilla del mar. Y se congregaron junto a Él grandes multitudes, por lo que subió a una barca(F) y se sentó; y toda la multitud estaba de pie en la playa.

Parábola del sembrador

Y les habló muchas cosas en parábolas(G), diciendo: «El sembrador salió a sembrar; y al sembrar, parte de la semilla cayó junto al camino, y vinieron las aves y se la comieron. Otra parte[a] cayó en pedregales donde no tenía mucha tierra; y enseguida brotó porque no tenía profundidad de tierra; pero cuando salió el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó. Otra parte[b] cayó entre[c] espinos; y los espinos crecieron y la ahogaron. Y otra parte[d] cayó en tierra buena y dio* fruto, algunas semillas a ciento por uno, otras a sesenta y otras a treinta(H). El que tiene oídos[e], que oiga(I)».

Propósito de las parábolas

10 Y acercándose los discípulos, dijeron a Jesús: «¿Por qué les hablas en parábolas?». 11 Jesús les respondió: «Porque a ustedes se les ha concedido conocer los misterios del reino de los cielos, pero a ellos no se les ha concedido(J). 12 Porque a cualquiera que tiene, se le dará más, y tendrá en abundancia; pero a cualquiera que no tiene, aun lo que tiene se le quitará(K). 13 Por eso les hablo en parábolas; porque viendo no ven, y oyendo no oyen ni entienden(L).

14 »Y en[f] ellos se cumple la profecía de Isaías que dice:

(M)Al oír, ustedes oirán, pero no entenderán;
Y viendo verán, pero no percibirán;
15 Porque el corazón de este pueblo se ha vuelto insensible,[g]
Y con dificultad oyen con sus oídos;
Y han cerrado sus ojos;
De otro modo, verían con los ojos,
Oirían con los oídos,
Y entenderían con el corazón,
Y se convertirían,
Y Yo los sanaría(N)”.

16 »(O)Pero dichosos los ojos de ustedes, porque ven, y sus oídos, porque oyen. 17 Porque en verdad les digo que muchos profetas y justos desearon ver lo que ustedes ven, y no lo vieron(P); y oír lo que ustedes oyen, y no lo oyeron.

Explicación de la parábola del sembrador

18 »(Q)Ustedes, pues, escuchen la parábola del sembrador. 19 A todo el que oye la palabra del reino(R) y no la entiende, el maligno viene(S) y arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Este es aquel en quien se sembró la semilla junto al camino. 20 Y aquel en quien se sembró la semilla en pedregales, este es el que oye la palabra y enseguida la recibe con gozo; 21 pero no tiene raíz profunda en sí mismo, sino que solo es temporal, y cuando por causa de la palabra viene la aflicción o la persecución, enseguida se aparta de ella(T). 22 Y aquel en quien se sembró la semilla entre espinos, este es el que oye la palabra, pero las preocupaciones del mundo[h](U) y el engaño de las riquezas(V) ahogan la palabra, y se queda sin fruto. 23 Pero aquel en quien se sembró la semilla en tierra buena, este es el que oye la palabra y la entiende; este sí da fruto y produce, uno a ciento, otro a sesenta y otro a treinta por uno(W)».

Salmos 17

Oración pidiendo protección

Oración de David.

17 Oye, oh Señor, una causa justa(A); atiende a mi clamor(B);
Presta oído a mi oración(C), que no es de labios engañosos(D).
Que de Tu presencia venga mi vindicación(E);
Que Tus ojos vean lo que es justo(F).
Tú has probado mi corazón(G),
Me has visitado de noche;
Me has puesto a prueba(H) y nada hallaste(I).
He resuelto que mi boca no peque(J).
En cuanto a las obras de los hombres, por la palabra de Tus labios(K)
Yo me he guardado de los caminos de los violentos(L).
Mis pasos se han mantenido firmes en Tus sendas(M).
No han resbalado mis pies(N).

Yo te he invocado, oh Dios, porque Tú me responderás(O);
Inclina a mí Tu oído(P), escucha mi palabra.
Muestra maravillosamente Tu misericordia(Q),
Oh, Salvador de los que se refugian a Tu diestra(R)
Huyendo de los que se levantan contra ellos.
Guárdame como a la niña de Tus ojos(S);
Escóndeme a la sombra de Tus alas(T)
De los impíos que me despojan(U),
De mis enemigos mortales que me rodean(V).
10 Han cerrado su insensible corazón(W);
Hablan arrogantemente con su boca(X).
11 Ahora han cercado nuestros pasos(Y);
Fijan sus ojos para echarnos por tierra(Z),
12 Como león que ansía despedazar(AA),
Como leoncillo que acecha en los escondites(AB).

13 Levántate, Señor(AC), sal a su encuentro, derríbalo(AD);
Con Tu espada(AE) libra mi alma(AF) del impío.
14 Líbrame de los hombres, con Tu mano, oh Señor(AG),
De los hombres del mundo, cuya herencia[a] está en esta vida(AH),
Y cuyo vientre llenas de Tu tesoro(AI).
Se llenan de hijos,
Y dejan lo que les abunda a sus pequeños.
15 En cuanto a mí, en justicia contemplaré Tu rostro(AJ);
Al despertar, me saciaré cuando contemple Tu semblante(AK).

Proverbios 3:33-35

33 La maldición del Señor(A) está sobre la casa del impío,
Pero Él bendice la morada del justo(B).
34 Ciertamente Él se burla de los burladores,
Pero da gracia a los afligidos(C).
35 El sabio heredará honra(D),
Pero los necios hacen resaltar[a] su deshonra.

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